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LUDOPATÍA
Recuperar lo perdido: el bienestar |
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Es muy común que el paciente ludópata sienta una gran excitación, e incluso euforia, cuando realiza la conducta de juego. Esta sensación es muy reforzante y es uno de los elementos que contribuye a que esta conducta se convierta en adictiva. Hay muchas ocasiones en las que, una vez instaurado el problema, el paciente toma conciencia de su adicción e intenta dejar de jugar, pero sólo lo consigue por cortos periodos de tiempo. En estos periodos de abstinencia es muy habitual que aumenten los niveles de irritabilidad. Es también frecuente que el paciente con juego patológico utilice la conducta de juego como un mecanismo para evadirse de los problemas o para evitar la emociones negativas. En este sentido utilizan la conducta de juego para “no pensar”. Generalmente ocultan a la familia el grado de implicación real en la conducta de juego minimizando su dimensión real ya que en muchos casos los pacientes, a diferencia de otras adicciones, pueden llegar a ser conscientes de que padecen un trastorno sin reconocerlo ante los demás porque se ven incapaces de dejar el juego. El paciente ludópata generalmente no pide ayuda profesional y únicamente acude al psicólogo cuando se siente acorralado por problemas económicos o por presión de la familia. Nuestros psicólogos aplican las terapias que se han mostrado más eficaces en el tratamiento de la ludopatia consiguiendo un éxito de un 86% en los pacientes tratados en nuestro centro en la finalización del tratamiento. Estos pacientes siguen libres de síntomas en los seguimientos que realizamos a los 6 y 12 meses de la finalización del tratamiento. PRIMERA VISITA En la primera visita en nuestro centro realizaremos una historia clínica exhaustiva sobre la conducta de juego: edad de inicio, aparición de las primeras señales de descontrol, sumas de dinero gastadas en los diferentes episodios de juego, duración y frecuencia de los episodios y consecuencias negativas que la ludopatia a tenido a nivel familiar, económico y laboral.En este primera visita también los factores que han llevado a cada caso en particular a perder el control sobre la conducta de juego y cuáles son los factores que la están manteniendo. También se realizará una exploración psicológica completa para detectar otros síntomas que suelen acompañar a la ludopatia como la sintomatología de ansiedad y de depresión y, en algunas ocasiones, otras adicciones. Al final de la primera visita se elaborará un plan de tratamiento específico para cada paciente. En esta primera visita perseguimos tres objetivos: 1. Realizar un diagnóstico adecuado. 2. Que el paciente entienda como ha llegado a desarrollar su ludopatia. 3. Diseñar un plan de tratamiento específico para casa caso. TRATAMIENTO Nuestros psicólogos están entrenados en el tratamiento que se ha mostrado más eficaz para superar la ludopatia, basado en el modelo psicopatológico de Sharpe. Los tratamientos basados en el modelo de Sharpe tienen una eficacia científicamente contrastada de más del 86% de los pacientes que inician un tratamiento.El núcleo de nuestro tratamiento es la intervención cognitiva que produce profundos cambios en la mente del paciente, modificando las creencias disfuncionales que mantienen la conducta de juego sin que los pacientes sean conscientes de ello. Estas intervenciones consiguen corregir las distorsiones o autoengaños que el ludópata se dice a sí mismo y que mantienen la conducta de juego (“en una de estas ganaré y lo recuperaré todo”, “cuanto más juegue más aprenderé y al final ganaré a la máquina”). La mayoría de tratamientos descuidan estos aspectos o no saben tratarlos eficazmente, ya que el uso de técnicas cognitivas requiere de entrenamientos especializados por parte de los psicólogos. Con este tratamiento conseguimos que más del 86 % de nuestros pacientes se mantengan libres de síntomas en los seguimientos que realizamos a los 6 y 12 meses. |
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